Una línea inconfundible, la del Sanlorenzo 106, que destaca por elegancia, equilibrio en sus volúmenes, relación equilibrada de llenos y vacíos y una extraordinaria cantidad de innovaciones, sin alterar o afectar mínimamente el "family feeling" típico del estilo Sanlorenzo.
Un barco que combina diseños de interiores realizados a medida por las mejores firmas con un equipamiento tecnológico de vanguardia. En efecto, para asegurar bienestar y confort en todas las estancias, en pocos metros cuadrados se recogen centenares de funciones eléctricas. Desde este punto de vista, todos los detalles se han cuidado con el máximo esmero, para lograr un sistema que funcione a la perfección en espacios optimizados. El Sanlorenzo 106 sabe acoger de forma impecable a los huéspedes y, al mismo tiempo, navegar magníficamente en el mar.
Para acompañar una instalación eléctrica de primera, en todas las estancias se han colocado unas auténticas joyas tecnológicas: los mandos Eikon Tactil de Vimar. Las líneas de estos dispositivos, que cautivan desde el primer vistazo, logran crear una superficie de vidrio lisa y luminosa, capaz de realzar incluso los interiores de un barco cuyo punto fuerte es precisamente el diseño, además de la tecnología.
Los mandos domóticos Vimar se alojan debajo de un material elegante: el vidrio color negro diamante. Al estar provistos de sensor de proximidad al dispositivo son capaces de activar la retroiluminación con led RGB. Para accionarlos basta un toque ligero, que gracias a la refinada tecnología de Eikon Tactil se convierte en control directo de la energía.
Desde estos dispositivos es así posible controlar de forma impecable la iluminación, para lograr la atmósfera más adecuada en todo momento. Luces difusas o más intensas: en cada camarote los pasajeros podrán crear el ambiente deseado, gracias a los dimmers correspondientes. Además, desde los mismos mandos Tactil también es posible accionar toldos y estores, cuyas distintas funciones son fácilmente identificables gracias a los iconos retroiluminados con una elegante luz color ámbar.
El armador eligió acompañar la exclusividad de Eikon Tactil con las líneas elegantes de la serie Eikon Evo, en dos versiones: vidrio negro diamante y vidrio blanco diamante. Formas diseñadas para llamar la atención, dimensiones que destacan con suavidad en las paredes y perfil ultrafino. Las placas Eikon enmarcan la amplia gama de tomas de corriente Vimar –desde las específicas para afeitadoras colocadas en los baños a las de estándar alemán– para satisfacer todo tipo de necesidad funcional.
Tanto Eikon Tactil como Eikon Evo se han elegido por su capacidad de integrarse perfectamente en entornos con un diseño tan refinado. Para la decoración del salón -cuyo punto focal es un biombo de acero y cuero que separa el hueco de la escalera para la zona noche-, además del sofá “Ground pieces” y las dos butacas Feel Good diseñadas por Antonio Citterio para Flexform, destaca Surface, una mesa de B&B diseñada por Vincent Van Duysen. Le acompañan las sillas Aston de Rodolfo Dordoni para Minotti, claramente inspiradas en las sillas típicas de los años 60.
En los camarotes, la versión de vidrio negro diamante de Eikon Tactil se engasta como un joya entre los revestimientos de los testeros de las camas, todos de tejido Dedar.
Por último, toda la iluminación controlada por los dispositivos Vimar está integrada por leds de luz cálida con aparatos de la firma Artemide personalizados y fabricados especialmente para Sanlorenzo, a los que se unen otras dos creaciones de Citterio: las lámparas de sobremesa Leukon, diseñadas para Maxalto y las luces de lectura Flex colocadas en los camarotes, diseñadas para Flos.
Fruto de un esmerado proceso de selección en el que el armador y todo el equipo de arquitectos de Sanlorenzo colaboraron activamente para encontrar las soluciones mejores, el 106 es un concentrado de tecnología y diseño Made in Italy, en el que no podían faltar los dispositivos Vimar.
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